Despojo
Ya no me interesan los horóscopos, ni chinos, ni aztecas ,ni mayas
Ya no ansío palabras, sólo acciones
Camino más a menudo por la playa
Disfruto secándome el pelo en la brisa
Y luego de lavármelo eludir el acondicionador
es un acto de libertad supérfluo pero instantáneo.
Ya no me interesa el pasado, ni el tuyo,ni el mío
Sólo la forma exquisita de conjugar el presente
Ya no admiro la vida de las celebridades
sólo la de los seres corrientes con los que me codeo,
esos que superan la cualidad de cualquier astro inventado
Ya no discuto por actos egoístas, sólo escucho la debilidad y fortaleza del que me habla,
y hago el mayor esfuerzo por querer abrazarlo con la mirada
Ya no me preocupa el valor de tus logros,
sólo el empeño que pones para llegar a ellos
No culpo, no conjuro, no maldigo, no rumoreo
Dejo en libertad a la sabiduría que me rodea y me supera
no la limito con mis pretenciones infantiles
Ya no me importa cómo tengas la piel, sólo la forma en que la utilizás
para irradiar todo lo que sos, en una caricia o un abrazo
No me quejo de mí, porque no tengo ni idea de la maravilla con la que fui creada,
ni porqué estoy, ni porqué soy.
Ya no me deprimo, porque cada respiro es una bendición
Ya no exijo tu atención, tan sólo dejo que me recuerdes ténue y silenciosa como el amanecer,
que se manifiesta diferente cada vez que lo ves, tan visceralmente igual.
Las etiquetas, las tablas, los valores numéricos, las ecuaciones y las soluciones rápidas,
ya no rigen mi existir, sólo son excusas hechas para personas más astutas que yo.
Ya no pienso analíticamente cada vez que converso contigo,
Sólo me dejo llevar por la sencillez de tus predicados
No culpo, no conjuro, no maldigo, no rumoreo
Dejo en libertad a la sabiduría que me rodea y me supera
no la limito con mis pretenciones infantiles
Ya no me importa cómo tengas la piel, sólo la forma en que la utilizás
para irradiar todo lo que sos, en una caricia o un abrazo
No me quejo de mí, porque no tengo ni idea de la maravilla con la que fui creada,
ni porqué estoy, ni porqué soy.
Ya no me deprimo, porque cada respiro es una bendición
Ya no exijo tu atención, tan sólo dejo que me recuerdes ténue y silenciosa como el amanecer,
que se manifiesta diferente cada vez que lo ves, tan visceralmente igual.
Las etiquetas, las tablas, los valores numéricos, las ecuaciones y las soluciones rápidas,
ya no rigen mi existir, sólo son excusas hechas para personas más astutas que yo.
Ya no pienso analíticamente cada vez que converso contigo,
Sólo me dejo llevar por la sencillez de tus predicados
Ya no pienso que todo èsto me se me da fàcilmente
Sino que es un constante anhelo de despojarme de lo que no soy.