cuando...

Cuando no me puedo dormir,
y la noche no es joven, sino vieja,por pensamientos que la frecuentan.
¿Por qué aparecen en la noche?
cuando no me duermo, pero tengo sueño,
cuando siento calor, pero tengo frío,
cuando no pienso en vos pero se me desintegra el pecho.
Porque no has dado la cara pero ya te estoy queriendo.

Cuando no me puedo dormir,
y la música es fiel compañera,
sin voz, pero con mensaje.
Noche joven avejentada,
voluntad en cuentagotas,
regocijo sin rastro,
sin vos, pero con testigos viviendo en mí.

Y oigo música sin cantor,
y siento frío con calor.
Y te siento, sin acordarme de vos.

Un impulso antiguo y sutil

Ella:
-Siento q me acosté a dormir una noche y al otro día no desperté. Y vi cosas que no quería. Mas no sentía nada. Entonces la pócima comenzó a actuar lentamente en mi cuerpo. Primero atacó mi garganta, mi mente, mis pies. No me ha agarrado el corazón aún, pero me amenaza con una navaja en el cuello. Me entrego. El sueño se ha pronunciado: es letárgico. Cuando de repente se activó mi memoria primitiva. Pulsión profunda que aflora. Y grité. Pero nadie me despertó. Escuché una voz que dijo: siguiente pasajero, siempre es igual, no hay otro comienzo. Todos somos como animales sometidos al peligro de las profundidades. Y de fondo, un bandoneón que se retorcía. Un piano furioso. Una mezcladora eufórica. Un silbido humano que se aleja y me lleva, suavemente, hacia el lecho. Ahora son los decibeles que se adueñan de mi andar. Ya no veo. Sólo siento en el pecho. Y escucho.

Anécdota

Recuerdo cuando era chiquita y viajé junto a mis padres a una isla canadiense cerca de la ciudad de Vancouver, llamada Galiano Island. Fueron verdad: las plantas con aspecto de serpientes gigantes, el bosque frondoso que daba a aguas puras donde las ballenas orcas habitaban, el paseo en bote, los árboles ahuecados que me permitían introducirme dentro y crear un refugio (y un imaginario) al estilo "Pocahontas", la brisa suave pero gélida en nuestras narices, la señora que era artista plástica y que me regaló una postal hecha por ella misma con tres hadas dibujadas, que jugaban a las escondidas en el bosque. Magia, por cierto. La magia que ocurre en la vida de cualquier ser ordinario, si pone atención y mira a través de los ojos de un niño. Sólo un recuerdo que me devolvió cierta calidez a la mente. Esta obra no es de la señora que yo conocí aquélla tarde, pero es de una de sus coterráneas, y me pareció igualmente justo compartirla.

gÔttª

"And so it is", dice una canción por ahí. Y así es. Lo que pasa, pasa. Lo que no fluye, recibe finalmente esa gota que faltaba para que el caudal se ponga en movimiento. Lo que está estancado recibe una última gota que tiene el poder de arrebasar el vaso. El lleno. Pasar horas enteras de falaz pérdida de tiempo en vida, para luego caer en la cuenta de que, una gota ha ganado la batalla, o la ha puesto en marcha, o la ha perdido. Lo minúsculo cobra sentido desde el vamos, y la grisexistencia se disuelve entre las partículas de una gota, tornándose, naturalmente, en algo cada vez más cristalino. Y todo, gracias a Dios, fluye.

Gracias George, Ringo, John, Paul, Jorge.

Sea

Ya estoy en la mitad de esta carretera
Tantas encrucijadas quedan detrás...Ya está en el aire girando mi moneda
Y que sea lo que Sea
Todos los altibajos de la marea
Todos los sarampiones que ya pasé...
Yo llevo tu sonrisa como bandera
Y que sea lo que Sea
Lo que tenga que ser, que
sea
Y lo que no, por algo será
No creo en la eternidad de las peleas
Ni en las recetas de la felicidad
Cuando pasen recibo mis primaveras
Y la suerte esté echada a descansar
Yo mirar tu foto en mi billetera
Y que sea lo que Sea
Y el que quiera creer que crea
Y el que no, su razón tendrá
Yo suelto mi canción en la ventolera
Y que la escuche quien la quiera escuchar
Ya está en el aire girando mi moneda
Y que sea lo queSea

AYER

Yesterday, all my troubles seemed so far away
Now it looks as though they're here to stay
Oh, I believe in yesterday
Suddenly, I'm not half the man I used to be
There's a shadow hanging over me
Oh, yesterday came suddenly
Why she had to goI don't know she wouldn't sayI said something wrong,now I long for yesterday
Yesterday, love was such an easy game to play
Now I need a place to hide away
Oh, I believe in yesterday
Yesterday, love was such an easy game to play
Now I need a place to hide away
Oh, I believe in yesterday
Mm mm mm mm mm

Esas combinaciones que nos matan

Hay ciertas cosas que, juntas, parecen aniquilarnos de un sólo golpe. Como es cierto, que también hay cosas que, juntas, parecen ser lo mejor del mundo, como es la fórmula de la piedra filosofal para un filósofo: una combinación de elementos que trabajan en comunidad para brindarnos nada más que dicha.
Pues bien, a mí me ha tocado verlas a las dos, las buenísimas y las malísimas. Y hoy les contaré la combinación de elementos que me tocó en suerte: Llueve, música de oasis de fondo Stand by Me, para ser más específica, ganas de mirar películas y no hacer nada más, ganas de que esa persona me abrace, cyber café, mucho abrigo, sueño, un departamento que me espera en solitario, presión académica en mente, vagabundeo en el corazón y lluvia, lluvia, lluvia.
¿Qué les parece?
¿Saben qué? Me voy a mirar pelis. Adiós.

Again baby, again

Por cierto, ayer estuve con ella, mi amiga de la adolescencia que ahora tiene una hermosa beba, a la que miro y no puedo creer que exista. Y ella, mi amiga, está hermosa, con cierta paz y una mirada brillosa en sus ojos. Es madre y está en un estadio que yo ya no entiendo en carne propia, pero que sí llevo en el instinto.
El círculo cobra más sentido, y quizá, hay cosas que hay que volver a hacer( o ver) hasta el cansancio para salir con ímpetu del viejo círculo, para meterse en uno nuevo. La línea recta es aburrida, aunque no se sabe lo que viene después, y eso me divierte.
Me retuerzo cuando veo faltas de ortografía, pero lo cierto es que yo misma las estoy cometiendo de cuándo en cuándo. Es producto del estado general, eso es lo que creo.
Volviendo al círculo, los griegos lo consideraban el mayor símbolo de la armonía, algo bueno debe tener.
Hasta el próximo punto del círculo amigos.

Again baby

Acá estoy, tratando de hablar de algo que me persigue desde siempre, los círculos. Entrar, rondar, girar, no salir. Luego salir, tratr de convertirse en una hermosa línea recta y cuando menos lo esperas, te vuelves a encontrar dentro de un redondondo y bien formado círculo. Acá, donde hay un vago silencio, aunque esté al lado de cinoc pèrosnas más que no conozco, ni ellas a mí. Y entre el bebe morosini, sí, ese que hace notas en canal doce y sale a la mañana en bien despiertos. Mi círculo me vuelve a atrapar, porque cuando encuentro algo que me salva, vuelvo a distraerme por el camino y me voy por el agujero circular.

Crítica del libro "El Danubio", de Claudio Magris

Fluir junto al Danubio
El Danubio es un acto solemne de la naturaleza. Una gesta heroica en sí mismo. Nadie atraviesa como él tantos países sin pedir permisos y sin firmar tratado alguno. Con soberbia y en silencio, el río se desplaza con calma, acomodando su inmensidad a la geografía que le toca en suerte.
Por momentos, el exceso de información (especialmente para los desentendidos) parece cortar la fluidez que, como el río, debería correr ilimitadamente. Pero si faltaran la historia, la geografía, los personajes verídicos y hasta la filosofía que moran junto al Danubio, el viaje sería incompleto. Aunque Magris sabe muy bien a dónde va, la realidad lo abruma; toda la teoría incorporada en sus neuronas se esfuma con el horizonte, entre la fauna y la vegetación que fielmente acompañan al río en su camino. Y es allí donde aprece lo cotidiano, lo inmediatamente real. Las vísceras del Danubio.
No sólo es la descripción enriquecida de un viaje por el Danubio, sino el minucioso adentrarse en cada ciudad. Magris encuentra singular belleza en hechos sencillos.
Nada más alejado de una típica descripción de un viaje que este libro, porque cuenta de una forma sutil la historia del autor, fundida con la historia del río. En reiteradas ocasiones, Magris analiza temas paralelos y demuestra que siempre se encuentra un punto en común entre el ser humano y la naturaleza. Y que, como el río, en la vida se fluye sólo hacia delante y, por ende, hacia algo que no existe. Lo estructurado y académico pierde significado lentamente, y el autor se limita a decir lo que ve y lo que siente a flor de piel.

Crazy- Gnarls Barkley( tambien para escuchar, muy muy bueno)

I remember when I lost my mind. There was something so pleasant about that phase.Even your emotions have an echo in so much space. And when your out there, without care, yeah, I was out of touch. But it wasn´t because I didn´t know enough, I just knew too much.
Does that make me crazy? Probably.
And I hope that you are having the time of your life, but think twice, that´s my only advice.
Come on now, who do you think you are?Bless your soul. You really think youre in control.
Well I think your crazy. Just like me.
My heroes had the heart to lose their lives out on a limb, and all I remember is thinking I want to be like them.
Ever since I was little, oh, it looked like fun. And it´s no coincidence I´ve come. And I can die when I´m done. But maybe I´m crazy, maybe you´re crazy. Probably.

Comisura

Mezcla de comicidad y hermosura. Esto es la prueba de cómo una palabra tiene el poder de grabarse en la mente y, tal como una canción pop que escuchamos arriba del ómnibus, rondar por días enteros haciendo escalas en el área de la reflexión, del ocio, del enamoramiento y del raciocinio. Genera asombro la belleza estética de la palabra y de su referente en la realidad y todo lo que guarda entre la terminación y el encuentro de sus elementos formantes. Con sólo pensar que allí está el misterio casi eterno de si la Mona Lisa nos mira con humor y se ríe de nosotros timida pero audaz o si lleva consigo una tristeza abominable. Nadie lo sabe ni lo sabrá nunca. La comisura de sus labios y la de los extremos de sus ojos se encarga de engañarnos dulcemente.
Por algo atrapa tanto. Esta palabra ya no es un plebeyo signo más del diccionario. Está inmortalizada en algún subconsciente. Y en la boca de la señorita Gioconda.